Hace eones, mucho
antes de que las tierras que conocemos hoy en día tu bien su forma, nació un
mito el mito de la diosa Freija ,de la sabiduría , aunque claro nuestra
historia comienza antes de que fuera nombrada. En esos tiempos los dioses se
auto impusieron un reto digno para ellos que serviría para dar un cargo a cada
uno de ellos. Este gran reto no era otro que un gran laberinto, pero no era un
laberinto normal era un laberinto capaz de sacar lo peor de cada uno, para
poder así demostrar su valía. Freija con paso firme se puso en camino desde el
centro del laberinto hacia la salida, la primera prueba le aguardaba, una
bifurcación, una decisión , tomar un camino fácil y próspero al principio pero
que a la larga por la falta de experiencia le haría fallar o continuar en el
claustrofobico y enrevesado laberinto, Freija se dio cuenta que el camino fácil
al final te hace caer en la inexperiencia y al final te hace cometer errores en
situaciones extraordinarias que se te presentan y que de haber acumulado
conocimiento podrías haber conocido su resolución, así pues Freija continuó su
camino en el laberinto. Más tarde se enfrentó a otras pruebas unas probaban su
sentido de la ética y como se ha de poder decidir y actuar sabiamente, no sólo
conociendo nuestra idea del mundo que nos rodea si no conociendo la del resto
de individuos que habitan a nuestro alrededor y esto nos ayuda a conocer de una
manera más compleja el mundo y por lo tanto la manera de actuar sobre el pudiendo
hacerlo en armonía con los demás. Después el laberinto quiso probar los ojos de
Freija y ver si era capaz de discernir lo verdadero de lo falso, lo resistente
de lo débil, el sabio de lo estúpido, lo hermoso de lo horrendo... La prueba se
le planteó complicada, en este mundo existen muchas cosas capaces de confundir
nuestra visión por que no todo es una fachada bonita si esta no oculta al
intenso y interesante en su interior, más si se va a convertir en algo fugaz
incapaz de resistir los embates de las corrientes del tiempo. Tras duros y
variados retos Freija alcanzo la salida y se dio cuenta de una cosa, la
sabiduría no se encontraba allí a la salida como premio a la prueba, la
sabiduría la había conseguido prueba tras prueba ,reto tras reto y ese camino es
la que le había convertido en lo que era. En ese instante conseguía salir del
laberinto un dios menor, Ignis, se saludaron con cordialidad y se dispusieron a
tomar la escalinata que daba salida al complejo. Mientras bajaban hablaron
sobre su experiencia en el laberinto, Freija se dio cuenta entonces de una
cosa, Ignis al ser un dios menor su camino no fue tan largo e incluso fuera aún
le quedaba mucho por recorrer pero su experiencia y conocimientos adquiridos
eran totalmente distintos a los suyos, y es más en este mundo repleto de
complejidades y retos a superar no basta con el conocimiento propio. No es que
Freija no fuera sabía es que su conocimiento era distinto y hay encontró la
clave de la verdadera sabiduría, que no es más que el camino que recorres te
dará conocimientos, cada uno recorrerá un camino y trabajando juntos y aunando
conocimientos distintos de cada uno es como se puede alcanzar la sabiduría.
Freija e Ignis salieron del complejo se despidieron el uno del otro y cada uno
partió a su hogar, Freija marcho sabiendo que debía contar con los demás para
ascender al trono de la sabiduría, aunque su conocimiento pudiera ser menor
como en el caso de Ignis era mucho lo que podía aportar. Freija finalmente
llego a su trono con una sonrisa y en su mente la idea de haber aprendido una
idea clave.
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